Escuela Pública aconfesional

Esto es muy preocupante...pues no se había visto nada así en los últimos 30 años.
Y no me refiero sólo a la actualidad que día a día presenciamos en nuestro entorno, sino a la tendencia cada año más acusada a hacer de nuestra capa un sayo, y a tragar con que salga el sol por donde quiera...con la fácil y ñoña complacencia de padres de alumnos, profesorado, equipos directivos, personal de la Delegación, responsables de la Consejería, y partidos políticos mayoritarios.
¿Es realmente España un país aconfesional?...¿Y la escuela pública, es aconfesional?
Porque no sólo es que se siga fomentando la aceptación de la asignatura de religión en la escuela pública (y su adoctrinamiento nacional-católico), o que se sigan colgando crucifijos en las paredes y despachos  de las aulas de algunos colegios públicos, o que se siga proponiendo de forma generalizada “e inocente” realizar actividades escolares para las festividades de Navidad (La Natividad del Señor), o para la Semana Santa (crucifixion de Jesús de Nazaret),  o para el Día del Padre (festividad de San José), etc...
Ahora resulta que en el Colegio Público Ponce de León, de León, una maestra OBLIGA A REZAR (!!!) a los alumnos de Infantil, a diario, todas las mañanas, antes de comenzar las clases...casi al igual que en el Colegio Público Emilia Menéndez de La Robla, donde parece ser que, según informan algunos padres, el ideario de monseñor Escrivá de Balaguer está arraigando de forma preocupante.
O que, para mayor sorna, sea la propia Universidad de León la que llegue a preparar, para su inauguración oficial del Curso, una EUCARISTÍA (!!!!)...O sea, ¡¡el más puro y duro nacionalcatolicismo en la mismísima Universidad!!
Uno, que, aunque apóstata y agnóstico racionalista, no carece de una mínima formación teo-filosófica ni ontológica, no quiere ni pensar ya en idílicos escenarios absolutamente laicos, sino tan sólo en los inútiles y denodados esfuerzos de aquellos escolásticos (Alberto Magno ó Tomás de Aquino a la cabeza) en contra del fundamentalismo religioso de la época, ...
¡¡Por dios!!....De seguir así, no dudeis en que dentro de poco escucharemos añorar los tiempos floridos del cardenal Torquemada...Y si no, al tiempo...
Yo, por si acaso, ya me he encargado en esa capilla sixtina del consumismo, que es “el santo Corte Inglés”, un traje ignífugo...por lo que pueda pasar si me tildan de hereje, y me proponen para avivar la hoguera....